sábado, 26 de mayo de 2012

Dignidad por dinero

Se atribuye a Benjamin Franklin aquello de que "quien sacrifica su libertad por seguridad, no merece ninguna de las dos". En estos tiempos de crisis, yo me atrevería a añadirle una apostilla: "Tampoco merece ninguna de ambas quien sacrifique dignidad por dinero". Esa frasecilla tan pomposa me ha venido a la mente al pensar en todo el patético follón que se está montando alrededor del proyecto del magnate estadounidense Sheldon Adelson de construir Eurovegas en España.

miércoles, 23 de mayo de 2012

Super Asturias Bros.

El autor y su obra
La concesión del Premio Príncipe de Asturias de la Comunicación a Shigeru Miyamoto, creador de Mario Bros, Zelda y la consola Wii, me ha provocado sensaciones contradictorias. Desde un punto de vista teórico, entiendo perfectamente los motivos para entregarle el galardón y considero la decisión acertada y valiente. Sin embargo, desde un plano más visceral no puedo evitar sentir que hay algo incorrecto en todo el asunto.

El videojuego forma parte de nuestro mundo, y ya no se puede hablar de que es algo moderno  y novedoso porque, de hecho, tiene más de tres décadas de antigüedad. En ese tiempo, ha logrado configurar su propia mitología y ha pasado a formar una parte importante del ocio y la vida cotidiana de millones de personas.

En la esfera de las distinciones seguimos anclados en clasificaciones decimonónicas, y está ocurriendo que existen muchas manifestaciones culturales y sociales que merecen ser reconocidas y, sin embargo, carecen de categoría específica. Ello ha propiciado que se haya premiado a cineastas en galardones a las bellas artes o a cantautores en certámenes literarios.

Por ello, no hay nada erróneo en premiar a quien ha diseñado iconos como los hermanos Luigi y Mario, pues el videojuego es, sin lugar a dudas, un ámbito de la comunicación audiovisual cada vez más importante y, por tanto, es de justicia que comience a reconocerse sus méritos. Hasta ahí todo correcto.

Sin embargo, al poco de conocer la noticia, leí en Twitter un mensaje del periodista de El País Guillermo Altares que me dio que pensar: "Manu Leguineche no tiene el Príncipe de Asturias de Comunicación pero si el creador de vídeojuego de un menda que da saltitos. Interesante."

Al leerlo, despertó esa parte más visceral a la que me referí antes, y creció en mí la convicción de que se trataba de un galardón injusto y, además, la enésima demostración de que la profesión periodística está siendo cada vez más ninguneada en España. ¿Acaso no hay en el mundo profesionales de la prensa dignos del premio? En estos tiempos en los que los ERE en las redacciones son lo habitual, hubiera sido un golpe moral celebrar la trayectoria de uno de estos profesionales.

Algunas horas después, ya más en frío, no me queda otra que reconocer que es una visión demasiado reduccionista e incluso sectaria pensar que solamente los periodistas pueden ser premiados con un galardón a la comunicación. El videojuego, Internet, la moda, el comic, las series de televisión... hay tantas cosas que hasta ahora no tenían cabida en el mundo de los honores, que quizá sea bueno ir ampliando las miras: como me "tuiteó" Emilio González Déniz al leer mi reacción, "entramos en un mundo que no acabamos de entender, pero es así".

martes, 22 de mayo de 2012

El wertedero

El ministro durante una reciente visita oficial a un instituto público
Culpar al Ministro de Educación Juan Ignacio Wert de estar cargándose la educación española sería simplificar mucho la cuestión. Está claro que es sólo el brazo ejecutor de una orden superior, pero sin duda lo está haciendo de la peor manera posible. Prueba de ello es que según el CIS es el ministro peor valorado, algo extraño ya que ese puesto normalmente suele corresponderle a quien ostenta carteras como Economía, Sanidad, Interior e incluso Defensa.

viernes, 18 de mayo de 2012

Liderazgo

Administrar la opulencia es sencillo. Como no falta lo básico, la sociedad está tranquila y simplemente desea que el gobierno no se meta en sus asuntos. Sin embargo, en épocas de crisis el desánimo se extiende con facilidad y, si hace mella en la población, puede hacer aún más difícil hallar una solución. En esos periodos aciagos es necesario un referente, una figura de liderazgo que, más allá de su capacidad de gestión para lidiar con los problemas concretos que sufra el estado, se erija en referente para la ciudadanía. El Roosevelt del New Deal; el Churchill de la Segunda Guerra Mundial; el Kennedy de la crisis de los misiles... alguien que inspire confianza, que cuando hable transmita fotaleza para continuar.

jueves, 17 de mayo de 2012

"Sombras tenebrosas": Carisma descontrolado

Johnny Depp y Eva Green: hay amores que matan...
Hay directores con unas señas de identidad tan marcadas que llega un momento en sus carreras en las que el tedio y la repetición aparecen sin misericordia. Es el caso de Tim Burton, cuya última película, "Sombras tenebrosas", es la enésima vuelta de tuerca a su personal estética que, además, está lastrada por una endeble estructura dramática que se hace soportable únicamente por su impecable factura técnica y el buen hacer de los actores.

miércoles, 16 de mayo de 2012

No han pillado el 15M

Foto: CC, obtenida en http://www.euroxpress.es/
Estos días se han redactado muchos editoriales y columnas acerca del 15M, cuando se ha cumplido un año desde su arrolladora irrupción. Y tras leer varios de ellos, queda claro que ni los partidos políticos ni los medios de comunicación generalistas han acabado por pillarle el punto al movimiento. El principal error que comenten es  seguir interpretándolo en clave de política tradicional. Así, como los partidos tienen líder, programa y estructura orgánica, los analistas intentan aplicarle la misma fórmula al movimiento. Y claro, no les cuadra. Porque, aunque tomar las plazas sin duda es un gesto político, el 15M no es una organización politizada ni partidista, es en esencia un movimiento cívico.

martes, 15 de mayo de 2012

Hola de nuevo

Hace dos años cerré mi viejo blog, El búho miope, en parte porque había acabado agobiándome la falta de actualizaciones, y en parte porque gran parte de lo que quería decir acababa descargándolo a través de las redes sociales.